miércoles, 28 de octubre de 2015

EL REY DAVID-Parte 3



DAVID EN EL DESIERTO

Dieron aviso a David, diciendo: He aquí que los filisteos combaten a Keila, y roban las eras. Y David consultó a Jehová, diciendo: ¿Iré a atacar a estos  filisteos? Y Jehová respondió a David: Vé, ataca a los filisteos, y libra a Keila.
Fue, pues, David con sus hombres a Keila, y peleó contra los filisteos, se llevó sus ganados, y les causó una gran derrota; y libró David a los de Keila.
Y fue dado aviso a Saúl que David había venido a Keila. Entonces dijo Saúl: Dios lo ha entregado en mi mano, pues se ha encerrado entrando en ciudad con puertas y cerraduras.
Y convocó Saúl a todo el pueblo a la batalla para descender a Keila, y poner sitio a David y a sus hombres.
Mas entendiendo David que Saúl ideaba el mal contra él, dijo a Abiatar sacerdote: trae el efod. Y dijo luego David: ¿Me entregarán los vecinos de Keila a mí y a mis hombres en manos de Saúl? Y Jehová respondió: Os entregaran.
David entonces se levantó con sus hombres, que eran como seiscientos, y salieron de Keila, y anduvieron de un lugar a otro. Y vino a Saúl la nueva de que David se había escapado de Keila, y desistió de salir. Y David se quedó en el desierto en lugares fuertes, y habitaba en un monte en el desierto de Zif; y lo buscaba Saúl todos los días, pero Dios no lo entregó en sus manos.
(1 S 23:1-2-5-7-8-9-12-13-14)




Entonces se levantó Jonatán hijo de Saúl y vino a David a Hores, y fortaleció su mano en Dios. Y le dijo: no temas, pues no te hallará la mano de Saúl mi padre, y tu reinarás sobre Israel, y yo seré segundo después de ti; y aún Saúl mi padre así lo sabe.
Y ambos hicieron pacto delante de Jehová; y David se quedó en Hores, y Jonatán se volvió a su casa.
Después subieron los de Zif para decirle a Saúl en Gabaa: ¿No está David escondido en nuestra tierra en las peñas de Hores, en el collado de Haquila , que está al sur del desierto?
Y Saúl dijo: Bendito seáis vosotros de Jehová, que habéis tenido compasión de mí. Observad, pues, e informaos de todos los escondrijos donde se oculta, y volved a mí con información segura, y yo iré con vosotros; y si él estuviere en la tierra, yo le buscaré entre todos los millares de Judá.
Y se fue Saúl con su gente a buscarlo; pero fue dado aviso a David, y descendió a la peña, y se quedó en el desierto de Maón.
Y Saúl iba por un lado del monte, y David y sus hombres por el otro lado del monte, y se daba prisa David para escapar de Saúl; mas Saúl y sus hombres habían encerrado a David y a su gente para capturarlos. Entonces vino un mensajero a Saúl, diciendo: Ven luego, porque los filisteos han hecho una irrupción en el país.
Volvió, por tanto, Saúl de perseguir a David y partió contra los filisteos. Entonces David subió de allí y habitó en los lugares fuertes de Engadí. (1 S 23:16 al 19-21-23-25-26-28-29)


DAVID PERDONA LA VIDA DE SAÚL EN EN-GADI


Cuando Saúl volvió de perseguir a los filisteos, le dieron aviso diciendo: He aquí David está en el desierto de En-gadi. Y tomando Saúl tres mil hombres escogidos de todo Israel, fue en busca de David y de sus hombres, por las cumbres de los peñascos de las cabras monteses.
Y cuando llegó a un redil de ovejas en el camino, donde había una cueva, entró Saúl en ella para cubrir sus pies; y David y sus hombres estaban sentados en los rincones de la cueva.
Entonces los hombres de David le dijeron: He aquí el día que te dijo Jehová: He aquí que entrego a tu enemigo en tu mano, y harás con él como te pareciere. Y se levantó David, y calladamente cortó la orilla del manto de Saúl.
Después de esto se turbó el corazón de David, porque había cortado la orilla del manto de Saúl. Y dijo a sus hombres: Jehová me guarde de hacer tal cosa contra mi señor, el ungido de Jehová, que yo extienda mi mano contra él; porque es el ungido de Jehová.
Así reprimió  David a sus hombres con palabras, y no permitió que se levantasen contra Saúl. Y Saúl saliendo de la cueva, siguió su camino. También David se levantó y saliendo de la cueva dio voces detrás de Saúl, diciendo:¡Mi señor el rey! Y cuando Saúl miró hacia atrás, David inclinó su rostro a tierra, e hizo reverencia.
Y dijo David a Saúl; ¿Por qué oyes las palabras de los que dicen: Mira que David procura tu mal?
He aquí han visto hoy tus ojos cómo Jehová te ha puesto hoy en mis manos en la cueva; y me dijeron que te matase, pero te perdoné, porque dije: No extenderé mi mano contra mi señor, porque es el ungido de Jehová. Y mira, padre mío, mira la orilla de tu manto; porque yo corté la orilla de tu manto, y no te maté.
Juzgue Jehová entre tú y yo, y véngueme de ti Jehová; pero mi mano no será contra ti. Y aconteció que cuando David acabó de decir estas palabras a Saúl, Saúl dijo: ¿No es esta la voz tuya, hijo mío David? Y alzó su voz y lloró, y dijo a David:  Más justo eres tú que yo, que me has pagado con bien, habiéndote yo pagado con mal.
Y ahora, como yo entiendo que tú has de reinar, y que el reino de Israel ha de ser en tu mano firme y estable, júrame, pues, ahora por Jehová, que no destruirás mi descendencia después de mi, ni borrarás mi nombre de la casa de mi padre.
Entonces David juró a Saúl. Y se fue Saúl a su casa, y David y sus hombres subieron al lugar fuerte.
(1 S 24:1 al 4-6 al 12-16-17-20-21-22)



DAVID Y ABIGAIL

Murió Samuel, y se juntó todo Israel, y lo lloraron, y lo sepultaron en su casa en Ramá. Y se levantó David y se fue al desierto de Parán.
Y en Món había un hombre que tenía su hacienda en Carmel, el cual era muy rico, y tenía tres mil ovejas y mil cabras. Y aconteció que estaba esquilando sus ovejas en Carmel. Y aquel hombre se llamaba Nabal, y su mujer, Abigail.
Y oyó David que Nabal esquilaba sus ovejas. Entonces envió David diez jóvenes y les dijo: Subid a Carmel e id a Nabal, y saludadle en mi nombre, y decidle así:  Sea paz a ti, y paz a tu familia, y paz a todo cuanto tienes.
Hallen estos jóvenes gracias a tus ojos, porque hemos venido en buen día; te ruego que des lo que tuvieres a mano a tu siervo y a tu hijo David. Cuando llegaron los jóvenes enviados por David, dijeron a Nabal todas estas palabras en nombre de David, y callaron.
Y Nabal respondió a los jóvenes enviados por David, y dijo: ¿Quién es David, y quién es el hijo de Isaí? Muchos siervos hay hoy que huyen de sus señores.
¿He de tomar yo ahora mi pan, mi agua, y la carne que he preparado para mis esquiladores, y darla a hombres que no sé  de dónde son?
Y los jóvenes que había enviado David se volvieron por su camino, y vinieron y dijeron a David todas estas palabras.
Entonces David dijo a su hombres: Cíñase cada uno su espada. Y se ciñó cada uno su espada, también David se ciño su espada; y subieron tras David como cuatrocientos hombres, y dejaron doscientos con el bagaje.
Pero uno de los criados dio aviso a Abigail mujer de Nabal, diciendo: He aquí David envió mensajeros del desierto que saludasen a nuestro amo, y él los ha zaherido.
Y aquellos hombres han sido muy buenos con nosotros, y nunca nos han tratado mal, ni nos falto nada en todo el tiempo que anduvimos con ellos, cuando estábamos en el campo.
                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                                          


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